Las anomalías de Animus son misterios que podemos encontrar en las regiones de Inglaterra en Assassin's Creed Valhalla. Se trata de cursos que nos permiten tener acceso a un paquete de datos para arrojar luz sobre la intriga en torno a Eivor.
Son muy fácilmente reconocibles en el mapa: un triángulo azul celta. El ambiente alrededor de esta anomalía hace que la pantalla parezca que esté fallando por completo, lo que inmediatamente despierta la curiosidad sobre este evento inusual. Es importante hacer estos acertijos, de lo contrario no podrás conseguir platino el juego o simplemente saber más sobre la obra.
En la región de Oxefordscire, la Anomalía se puede encontrar al suroeste del Monasterio de San Albano, no lejos de un lago en el medio del mapa.
Consejos para completar la anomalía
Las cosas comienzan a complicarse un poco más a partir de esta anomalía. Tendremos que ser muy ágiles para no “morir” bajo los bloques rojos. No intentes saltarte los pasos saltando demasiado alto, tu personaje se desmaterializará automáticamente, llevándote de vuelta al punto de guardado automático.
Para avanzar con facilidad en este curso, aquí está el procedimiento a seguir:
- Baja por los bloques a tu derecha y mueve el reflector hasta que toques el bloque al otro lado del acueducto.
- Dirígete al otro lado del acueducto que pasa por debajo.
- Apunte el foco que indica hacia los bloques en el extremo izquierdo del pozo en el borde lejano de los bloques; debe apuntar al segundo bloque cuadrado
- El foco debe colocarse de modo que toque el primer foco que moviste hacia el cuadrado gris
- Ahora, el bloque de forma cuadrada debería ser utilizable
- Luego, regresa a los bloques del lado izquierdo, mientras pasas por la parte inferior, para mover el foco e iluminar el bloque en forma de rectángulo
Una vez que la pasarela central esté completamente iluminada, puedes seguir adelante, pero te recomendamos que te tomes tu tiempo, porque como hemos dicho, los bloques rojos desmaterializarán tu personaje.