"¿No tienes permiso para jugar?" se ha convertido en un mensaje muy popular dentro de Fortnite. Y es que desde hace unos días el battle royale de Epic Games está experimentando una serie de problemas con sus servidores que podrían igualarse a los de Warzone, porque el resultado es el mismo: algunos jugadores no pueden entrar a jugar con normalidad.
Algunos jugadores creen que es porque Epic les ha baneado, pero nada de eso. El problema de conexión es por parte de Epic, lo que impide que muchos puedan entrar a Fortnite como lo harían antes. De modo, que igual que en Warzone, dependemos de la conexión que nos ofrezca la compañía en cuestión.
¿Cómo solucionamos el problema?
Igual que en el caso de Call of Duty: Warzone, la única solución para este problema es únicamente esperar a que Epic Games nos permita reconectarnos con normalidad al juego. Para acelerar el proceso podemos tratar de reiniciar el router, asegurarnos de que nuestros puertos están correctamente y reiniciar el sistema en el que estemos jugando.
Pero más allá de eso, dependemos totalmente de que Epic nos permita volver a acceder a los servidores. Ahora mismo la compañía no ha dado demasiados datos el motivo por el que parece que muchos jugadores no pueden jugar como antaño, pero suponemos, igual que con el caso de Warzone, que se trata de la cantidad de usuarios que intentan entrar constantemente. Y todo tiene un límite.