La beta cerrada de Valorant ya ha empezado, y algunos afortunados ya están viciando sin parar al nuevo first person shooter táctico de Riot Games, que se lanzará de forma oficial en verano de 2020 si todo va según lo previsto para la compañía. Valorant, a priori, es un juego un poco complicado en el que la curva de aprendizaje puede hacerse un tanto cuesta arriba.
Para aquellos que vengan de jugar a otros shooters en PC, como Counter-Strike: Global Offensive, puede resultar mucho más fácil. Sin embargo, para los que sean nuevos puede que una horneada de consejos les venga bien para poder hacer frente al nuevo título de los responsables de League of Legends.
Así pues, en esta guía vamos a daros una serie de consejos y trucos para que podáis entrar preparados a Valorant y podáis ganar partidas con una mayor facilidad. Vamos con ello.
Calienta antes de meterte en una partida
El entrenamiento es la primera fase por la que atravesamos en Valorant. Brimstone, el agente veterano del juego, nos explica los tips más importantes: como el manejo del arma, la función de las habilidades, la colocación de la bomba, etc. Nuestro consejo es que, una vez lo completemos, no nos despeguemos tan rápido de él, puesto que este entrenamiento puede ayudarnos a practicar puntería para volvernos más rápidos y así mejorar poco a poco nuestro aim.
Si venimos de shooters como Call of Duty, nos daremos cuenta en menos de lo que canta un gallo de que no sirve de nada lo buenos que seamos en los juegos de Activision, dado que aquí los disparos al cuerpo son poca cosa comparados con el daño que proporcionamos a los enemigos si conseguimos asestarles un headshot (un disparo a la cabeza). En la misma tónica que Counter-Strike, deberemos perfeccionar nuestra puntería para ir directos a la cabeza de los enemigos. Olvídate de moverte y disparar a la vez.
Antes de cada partida, si podéis y disponéis del tiempo suficiente, pasaos un poco por el entrenamiento para poder calentar las manos y no ir fríos a las partidas. Cambia mucho la cosa, os lo aseguramos, y así también iréis obtenido memoria muscular para, una vez más, buscar la cabeza de los enemigos y no ir al cuerpo.
Comunícate con tus compañeros constantemente
Una de las palabras claves de Valorant es ese "táctico". No está ahí por cualquier cosa, sino porque el shooter de Riot Games requiere de una comunicación constante con nuestros compañeros. Si bien es cierto que podemos hablar por chat con los jugadores de nuestro equipo, es recomendable poder hacerlo a través de voz, puesto que las rotaciones y los callouts que podamos dar sobre la posición de los enemigos va a ser mucho más rápida y directa.
Pero sea como fuere, uséis el método de comunicación que sea, compartir información con el equipo es vital para que las rondas vayan sumando a nuestro favor. De poco sirve ir por el mapa como un one-man-army e intentar acabar con todos los rivales por nuestra cuenta. Hay que hablar sobre la posición de la bomba, las habilidades que tiene cada miembro para poder realizar tácticas, etc. Nuestra pantalla debe ser descrita en todo momento a nuestros aliados para que se cree una red en la que todos tengamos consciencia de lo que ocurre en cada parte del mapa.
Controla y conoce tu arsenal
Parece algo evidente, pero para muchos usuarios no lo es. Cada arma en Valorant tiene unas características muy particulares que la han muy diferenciable al resto. Es por ello por lo que es muy importante tener un control pleno de las armas que estamos usando en cada ronda: cuál es su tiempo de recarga, qué rango y daño tiene, qué animación realiza una vez cambiamos de cuchillo a arma (para saber cuándo debemos cargar con ella), etc.
En Valorant se puede matar tanto desde la cadera como con la mirilla, pero hay que evitar mantener el gatillo apretado y soltar balas como si fuera una minigun. La clave está en las ráfagas pequeñas a la cabeza para que todas ellas impacten. La dispersión de balas está a la orden del día, y si disparamos sin ton ni son no atinaremos ni siquiera las primeras que salgan de nuestro cargador. Por lo que nos remitimos al primer punto: ve al entrenamiento a poder practicar con todas y cada una de ellas. O con las que te sientas más cómodo, lo que prefieras.
Selecciona bien las habilidades
Las habilidades de Valorant pueden abrumar un poco. Sobre todo porque cada personaje tiene unas propias diferentes a las del otro personaje. Y si no estamos familiarizados con ellos puede ser bastante caótico. Nuestro consejo, es que no nos volvamos locos por ellas. Es decir, son importantes y hasta decisivas para ganar algunas rondas, pero no hay que perder la cabeza comprando todas las que tenemos disponibles en la tienda y lanzándolas por los mapas con la intención de obtener alguna baja en lugar de buscar la victoria.
Hay que tener claro el momento clave para usar cada una de ellas sin malgastarlas. Porque, como decíamos, cuestan un dinero y conviene no derrochar para poder recargarlas, conseguir escudos para la siguiente ronda y renovar arsenal. Así pues, la clave está en repartir las tareas con el equipo, escoger un rol, y comprar y usar las habilidades en el momento oportuno. Por ejemplo, la habilidad que posee Phoenix para cegar a los enemigos puede ser útil si queremos entrar en un punto para desactivar el Spike o, por el contrario, queremos colocarlo en una zona en la que sabemos que hay enemigos.
Ahora bien, sí que es cierto que hay personajes que pueden usar sus habilidades para ellos mismos. Como la curación de Sage o la velocidad y saltos de Jett. En ese sentido, ahí entra en juego nuestro juicio a la hora de valorar cuándo toca aprovecharlas y cuándo no. Sin mirar demasiado lo que busca el equipo. Aunque con Sage debemos estar más pendientes para sanar y revivir aliados. Lo mismo ocurriría con los humos de Brimstone.
La economía es tu amiga
Cada ronda comenzará de la misma manera, en la tienda. Tendremos unos segundos para equiparnos y adquirir a cambio de dinero armas, habilidades y escudos. Pero, ¿Cuánto dinero tendremos? Eso lo respondemos de la siguiente forma:
- Ronda ganada - 3.000
- Una muerte - 200
- Derrota - 1.900 a 2.900 según la racha de derrotas.
En orden de prioridad, diríamos que habría que comprar: Escudos>Arma>Habilidades. Habla con tus compañeros, porque hay ocasiones en las que tendréis poco dinero y será necesario disputar una ronda sin gastar demasiado dinero, para ahorrar y preparar una ofensiva mucho más equipada a posteriori. Esto se denomina hacer una "ronda eco".
Conoce los mapas como la palma de tu mano
Un total de tres mapas están disponibles en la beta cerrada de Valorant: Haven, Bind y Split. Cada uno tiene sus peculiaridades, aunque se basan en lo mismo, plantar un Spike en uno de los puntos de bomba de dicho mapa, mientras el otro equipo trata de impedirlo.
Esto no es un duelo por equipos o un Battle Royale en el que existen casi infinitas formas en las que te puedes encontrar a un enemigo. Si conoces los mapas al dedillo, más o menos sabrás donde pueden estar los enemigos, convirtiendo Valorant en un juego de puntería más que de otra cosa.
El siguiente paso sería conocer las zonas del mismo y como comunicarte con tu equipo. Ponerle motes a lugares como "fuente", "larga" o "baños" es a lo que has de aspirar en el futuro próximo, ya que mejorará tu coordinación con tus compañeros una auténtica barbaridad.