El 10 de julio aterriza en PS4, Xbox One, PC y Stadia el juego basado en el Campeonato Mundial de Fórmula 1, F1 2020. Codemasters ha redoblado esfuerzos por su apuesta automovilística y, por primera vez, llega casi a la vez que el comienzo de la atípica competición real de este año.
Sin embargo, el campeonato que podremos simular no es el que podremos seguir este año, sino el que habría sido si el Coronavirus no hubiera dado al traste con los planes de medio mundo. De esta forma, F1 2020 sí que tiene todos los circuitos, coches y demás parafernalia de la mejor Fórmula 1, y además no se conforma con eso, sino que también busca seguir construyendo sobre las bases de la licencia para ofrecernos el juego más completo de esta disciplina deportiva.
Además, Codemasters logra lo que ya suele hacer de forma excelente: equilibrar la experiencia para todo tipo de aficionados. Es decir, que si eres de los seguidores de la F1 que no tienen ni idea, los codies han pensado en ti. Y si eres de los que disfrutan ajustando los reglajes en cada circuito en función de las condiciones climatológicas, también. Por supuesto, los términos intermedios también están bien cubiertos. El resultado es un juego de carreras intenso y que se siente sólido y realista en casi cada curva. El manejo de los monoplazas ha mejorado aún más y el nivel de detalle puede llegar a ser abrumador, si te gusta fijarte en el desgaste del neumático, la distribución de pesos en tu bólido, los daños, etc... Si eres experto debes saber que el ERS se ha simplificado y que la IA rival también se ha retocado, aunque a veces se pase de agresiva.
La clave de todo este asunto de la accesibilidad viene de la mano del nuevo modo casual que nos lo pone más fácil en todas las condiciones, con menos sanciones si chocamos, mejor control fuera de pista, o añadiendo ayudas de conducción (que sigue habiendo montones, para que podamos configurar manualmente la experiencia a nuestras exigencias de conducción). El resultado, como decíamos, es que F1 2020 será disfrutable para un rango más amplio de jugadores que en anteriores ediciones del título oficial del mundial, sin que haya perjuicio para los habituales de la licencia.
A esto hay que sumar el gusto por el realismo en F1 2020, con daños en los monoplazas incluidos (aunque mejorables, un año más) que, a pesar de las facilidades para los conductores nóveles, lo alejan del formato más arcade del género. Para que os quede claro, F1 2020 es un juego profundo y que requiere tiempo para conocer los circuitos y monoplazas. Puedes complicarte tanto como quieras, por supuesto, pero eso no hace que se convierta en una experiencia de conducción menos realista. También nos parece que le falta algo de recorrido, al gestionar solo al onceavo equipo de la parrilla, y no un equipo menor desde sus inicios, pero tiene sentido respecto a la propuesta general del juego.
Modos de juego
Esto, por supuesto, es solo el esqueleto de la propuesta, que se articula después con los distintos modos de juego y posibilidades que Codemasters ha diseñado para F1 2020. No faltan a la cita los modos de juego clásicos de la serie, pero el foco principal es el nuevo modo "Mi Equipo", la auténtica estrella de esta entrega en cuanto a novedades se refiere en esta entrega. Se trata de un modo en el que nos salimos del papel habitual de piloto, y nos ponemos a los mandos de una escudería de Fórmula 1. Mezcla la experiencia de un mánager con la jugabilidad activa en los circuitos y nos propone tomar las decisiones relevantes para nuestro equipo, empezando por la personalización visual, y continuando con decisiones monetarias para mantenernos dentro del presupuesto limitado que manejamos. Podremos elegir el proveedor del motor, el piloto que nos acompaña, las instalaciones a nuestra disposición, firmar patrocinadores, responder a la prensa, tratar de evolucionar los monoplazas con un árbol de mejoras...
Una experiencia interesante y satisfactoria que da una vuelta a lo ya conocido y nos permite meternos aún más en la propuesta de vivir la Fórmula 1 de F1 2020. Por supuesto, el centro de la acción sigue siendo la propia conducción, por lo que no penséis que estamos ante una suerte de mánager deportivo, aunque incluya múltiples elementos de gestión.
Mi Carrera sería la otra estrella en cuanto a opciones de juego para el jugador solitario. Por supuesto, esta no es una opción de nuevo cuño, sino la evolución de lo que ya conocíamos, al meternos en la piel de un piloto que comienza en la F2, y tener que ir ascendiendo hasta tener opciones de ganar el mundial de F1 en sucesivas temporadas (hasta 10). Pilota, responde a la prensa, evoluciona el coche y sobrevive en el circo mundial de la F1. Nos ha gustado la importancia añadida a la F2, en la que podremos elegir la duración de la temporada y que, además, se actualizará con pilotos y coches del campeonato 2020 en una actualización gratuita futura.
Estos dos modos de juego para un jugador son las estrellas, pero no las únicas opciones para el usuario solitario. Se añaden las opciones clásicas de carreras contrarreloj, campeonatos, etc sin mas historia que la propia competición y diversos retos con monoplazas actuales y clásicos. Nada especialmente novedoso en esta vertiente, pero sí suficiente para complementar la propuesta de Codemasters. No se le puede pedir mucho más en este sentido a F1 2020.
Opciones multijugador
La primera buena noticia en este sentido es que F1 2020 da cabida de nuevo al olvidado modo a pantalla partida para 2 jugadores a la vez, sin que haya excesivos sacrificios técnicos para compensar el doble de trabajo de las respectivas máquinas. Una adición muy en la línea de favorecer la entrada de nuevos jugadores, al poder participar en los distintos grandes premios cada uno con sus propias ayudas de forma individual.
A esta opción le acompañan diversas posibilidades que buscan hacer sonreir a los más expertos, con ligas online de distintos niveles, un pasaporte único para cada jugador con sus credenciales y habilidad, eventos especiales que se mueven en función de los eventos del mundo real... Incluso será posible hacer de espectador en los eventos de esports que Codemasters ha preparado para F1 2020. En el momento de escribir estas líneas no hemos podido profundizar demasiado en esta vertiente del juego, dada la escasa población de los servidores en su etapa pre-lanzamiento. Sin embargo, si juzgamos por el funcionamiento de esta parte del juego en F2 2019, podemos concluir que se tratará de una experiencia satisfactoria para aquellos que quieran profundizar en el gran circo de la Fórmula 1 de manera virtual.
Incluso se ha aprovechado la coyuntura para incluir una suerte de pase de temporada con el que podremos desbloquear distintos elementos cosméticos en función de nuestros resultados en las carreras de F1 2020. De nuevo, se trata de otro elemento que no estaba disponible de inicio, pero a priori parece algo que no tendrá peso en las competiciones, sino que está destinado a añadir algo de 'color' a la competición.
Impecable en lo técnico y lo sonoro
La serie F1 de Codemasters siempre tiene un aspecto imponente, y F1 2020 no es una excepción. Se trata de una emulación más que buena de todo el campeonato del mundo a todos los niveles, y cada vez consigue copiar a la realidad mejor. No es que todos los vehículos sean copias 1 a 1 de los reales o que los circuitos representen sus homónimos en el campeonato del mundo, es que Codemasters siempre quiere ir más allá de la perfección. Por eso los dos nuevos circuitos de este año, Hanoy y Zdavoort han sido creados desde cero, con un resultado impresionante. Por eso, los efectos climatológicos dinámicos tienen mejor aspecto que nunca, con mención especial a los efectos de luz.
Entendemos que es difícil ya, a estas alturas de generación, seguir evolucionando la propuesta gráfica, y por eso nos contentamos con pequeño pasos que contribuyen a dotar de nueva vida cada carrera. De esta forma los circuitos parecen algo más vivos, la velocidad más endiablada y los coches más potentes y detallados. Por eso siguen retocando la interfaz de pantalla, aunque para los novatos puede ser algo complicada en un principio. Al final, el objetivo es que F1 2020 sea casi indistinguible de las retransmisiones deportivas, y en las repeticiones lo han conseguido. Por eso no podemos más que quitarnos el sombrero por el gran trabajo que ha hecho Codemasters en este sentido.
Por otra parte el juego se mueve sin problemas a 4K y 60 imágenes por segundo en las versiones avanzadas de consola, y parece que se comporta de manera igualmente eficiente con la mayoría de PC, por lo que podéis esperar una experiencia sin sobresaltos ni errores técnicos, aunque algún tiempo de carga resulte excesivo (aunque el sistema de menús integrado en ello hace por 'entretenernos').
En lo sonoro, no hay pegas que ponerle a los efectos de sonido, tan abrumadores como siempre, y sabiendo capturar la bestial potencia de los monoplazas de F1. Sin embargo, ni la música entre carreras, ni las voces dobladas al castellano nos han acabado de convencer. Lo primero por resultar demasiado planas, sin personalidad. Lo segundo por ser robóticas por momentos y faltas de la emoción que un deporte como este debería rebosar. Aún con esas, cumplen.
