Ghostrunner llega en un periodo un tanto complicado. Por un lado, la mayoría de los jugadores están pendientes de la llegada de la siguiente generación de consolas (a pesar de que estas no vayan a tener apenas juegos de lanzamiento) y de estrenos de videojuegos como Watch Dogs Legion, Assassin's Creed Valhalla o Cyberpunk 2077. Este último, de hecho, es con el que a priori Ghostrunner comparte más similitudes, precisamente porque su temática está inspirada en el cyberpunk y también tiene elementos de first person shooter, aunque no lo sea en sí mismo. Digamos, para entendernos, que es más como un Mirror's Edge, con su cámara en primera persona y un plataformeo muy similar al del título de 2008 combinado con elementos y características de Titanfall.
Entrando en términos de narrativa e historia, lo cierto es que Ghostrunner se queda en un plano muy alejado de lo que muchos títulos están ofreciendo ahora mismo, que son libretos extremadamente completos y complejos en los que se intenta poner a la misma altura la jugabilidad y el guion. Los jugadores son cada vez más exigentes con esto último y cada vez más se buscan historias con una complejidad superior a lo habitual y con fórmulas que aproximen las tramas a lo que veríamos en un largometraje o una serie de televisión. Las intenciones de One More Level no son las de crear una narrativa profunda, ni mucho menos. Ghostrunner está hilado, por descontado, por una serie de acontecimientos que son el motor del videojuego. Lo que hacen que tengamos un motivo para pasar de un nivel a otro, pero ni por asomo son lo que verdaderamente importa en un título así. Aquí, la compañía premia mucho más la jugabilidad y deja esos libretos complejos para obras como Cyberpunk 2077 u otros juegos ya mencionados.
Ahora bien, eso no quita que Ghostrunner no ofrezca a los más veteranos del género un conjunto de guiños a obras magnas de la ciencia ficción como Matrix, que incluso goza de un momento totalmente dedicado que los amantes del largometraje de las hermanas, o hermanos, Wachowski disfrutaran. En otras palabras, que en Ghostrunner toca centrarse en lo que se nos exige a nivel jugable y no estar cogiendo y soltando el mando constantemente para atender a cinemáticas profundas y diálogos para enmarcar. En el juego de One More Level se viene a sufrir y a sudar a base de disparos y katanazos.
La verdad es que no esperaba, para nada, que Ghostrunner fuera un desafío como el que plantea One More Level. A primera vista, el título parece un first person shooter en el que además de tener una katana podremos controlar armas de fuego, o por lo menos a distancia, que aderecen y faciliten su dificultad y lo acerquen a otras obras como Titanfall, de la cual bebe directamente en lo que a movilidad y jugabilidad se refiere. Pero no podía estar más equivocado, porque lo que busca el equipo de One More Level es poner a prueba tus reflejos, tu paciencia, tu memoria muscular y, sobre todo, la capacidad de reacción para replantar estrategias en mitad del caos.
Igual que en Hotline Miami morimos a la primera de cambio. Es decir, que a la mínima que cualquier enemigo nos dé un golpe tendremos que reiniciar el nivel. Es un tipo de juego orientado al ensayo y error. A aprender rápido de nuestros errores y memorizar los diversos niveles y sus estructuras para que de cara al siguiente intento que realicemos nos sea mucho más fácil superar a los enemigos y obstáculos que nos encontremos por el camino. Si no sois jugadores pacientes o no os van los juegos en los que tenéis un único intento y se exige la perfección para poder pasar a la siguiente fase, puede que Ghostrunner no sea vuestro juego.
Una vez hemos descubierto que en lo que se basa el juego es un salto de niveles constante a la máxima exigencia, ahora toca echar el ojo a cómo es ese diseño de niveles y si One More Level ofrece la variedad suficiente como para que el jugador tenga motivos para permanecer enganchado. Y ya os podemos ir adelantando que Ghostrunner cumple de maravilla con eso. A diferencia de ese Hotline Miami en el que se basa, entre nivel y nivel el juego de One More Level brinda secuencias de plataformeo para que los jugadores se relajen y puedan recuperarse de cara al siguiente enfrentamiento con múltiples enemigos.
Es un modus operandi similar al de las películas de terror: cuando al espectador se le hace pasar por una extensa secuencia repleta de tensión en la que la atmósfera es absolutamente terrorífica y la adrenalina del público va in crescendo para prepararse para el peligro que están a punto de contemplar, acto seguido se pasa a una escena un tanto más pausada para que los nervios bajen a los mínimos y haya espacio para poder echar alguna que otra respiración profunda para relajar las altas pulsaciones del corazón.
Ese plataformeo, además, también sirve para practicar de cara a esos enfrentamientos con los enemigos, puesto que muchas de los elementos que forman parte de las secuencias de plataformas las encontramos después en mitad de los combates. Es un sistema similar al que ejecuta Doom Eternal, que mezcla partes en las que el jugador debe superar una serie de obstáculos (y sirven para despejar la mente y no estar en constante frenetismo) y luego eso se incorpora a las batallas contra demonios para que el jugador pueda usarlo a su favor y acabar más cómodamente con los rivales. La variedad de enemigos, que viene siendo de lo más importante, es bastante justa pero satisfactoria. Aunque puede llegar a cansar tener que abatir a determinados rivales siempre del mismo modo. Pero eso ocurre en prácticamente todos los videojuegos, de modo que tampoco nos pondremos tiquismiquis aquí. Poco a poco iremos haciéndonos más fuertes y desbloqueando nuevas habilidades para hacer frente a los enemigos, que también irán siendo más poderosos, pero la dificultad siempre será adaptativa y no bajará.
Y en cuanto a los apartados visuales y sonoros, ciertamente Ghostrunner no es que sea una revolución en ningún sentido ni tampoco lo mejor que hemos visto últimamente, pero sí que cumple de forma sobrada con los mínimos y tiene un apartado artístico impecable que sin duda convierte al título en la antesala perfecta de cara a ese ya mencionado Cyberpunk 2077, tanto por su estética como por su movilidad, como por su acción desenfrenada.
Ficha técnica
- Fecha de lanzamiento: 27 de octubre de 2020
- Plataformas: PS4, Xbox One, PC, Nintendo Switch, PS5, Xbox Series X
- Desarrollador: One More Level
- Distribuidor: One More Level
- Precio: 29,99 €
- Probado en: PC